martes, 12 de mayo de 2009

números

te metiste
una vez en mi vida
dos veces en mi cama
tres en mis sueños
te llevaste
un poema a medias
dos besos en las sombras
tres lágrimas tibias
me dejaste
un dolor
dos culpas
tres interrogantes
ayer volviste
con un cuerpo cálido
dos ojos húmedos
y tres razones
para pedirme
que te ame

sábado, 9 de mayo de 2009

Aunque no lo creas

Hoy aunque no lo creas
es un día perfecto para amar un cuerpo,
un alma, un corazón, los muslos, los ojos,
los cabellos, las sonrisas, los labios,
de una mujer que no conoces.

O de una mujer que conoces
aunque sea en tus sueños.

Es un día perfecto
para que me acaricies como una paloma
extraviada en el trayecto de su viaje.
O mejor aún para que me acaricies
como la mujer que soy: sin adornos, sin ropa.

Un día perfecto para mirarte desnudo
como si hubieras nacido de mi.
Es perfecto el día
para espiar por la ventana de ese cuarto
como se moja la gente con la lluvia.

Y cuando se haga la noche yo me iré,
después de sentarme al borde de la cama.

Es un buen día, efectivamente.

miércoles, 6 de mayo de 2009

Otoño

Como dos amantes se buscaron los ojos.

“No habrá mas días de ocres tristezas

ni mas noches de cegadora ausencia”;

se dijeron entre besos y soles ese día.

(Tienen una historia que los marca,

que arde y quema.

Y cientos de hojas de éste otoño,

caen para cubrirla).

Como dos extraños se cruzaron las caras.


Tiempo atrás se encontraban ansiosos,
buscando la piel propia en la del otro,

teniendo deseos humanos y prohibidos.

Se perdieron los ingenuos sueños

de aquellos ojos.

Ahora caminan alejados y secos

como dos robles.